Viviendo en una sociedad heterogénea, donde ver pasar a las personas es como ver pasar los postes de luz, claro, eso siempre puede cambiar si volteas y ves sus ojos, algo hay en los ojos de todos que, o te aterran o te gustan, pocas veces pasan desapercibidos, cuando pasan desapercibidos es en realidad, peor que cuando aterran.
Mucha gente  tantas veces me resulta asì, sobretodo cuando se enredan en sus palabras, cuando buscan en forma desesperada de justificar su vida engrapándose a la tuya, o al momento o al trabajo, exacto, si es el trabajo y tú casualmente estás en lo mismo, no puedes fingir que es un simple poste de luz, tienes que mirarle a los ojos, sobretodo cuando es desesperante e imposible no mirarles, yo no puedo no mirar a los ojos a las personas cuando hablo con ellas, tal vez buscando alguna conexión animal, me siento tan bien con los animales, tanto que he decidido ir al registro civil y cambiar mi especie de: ser humano a ser viviente. 



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