frío

La casa en la mañana era fría, así que decidió construir una pequeña chimenea pero cuando la terminó descubrió con dolor, que la chimenea no era suficiente, así que decidió tejer un sueter de lana, una vez que se lo puso y de frente a la chimenea, para su sorpresa seguía sintiendo frío así que se preparó un té bien caliente. Mientras se tomaba su té con su nuevo sueter pesado y calientito, de frente a la chimenea, descubrió que le faltaba algo de leña, no había leña de buena calidad, así que se compró una buena hacha y se fue hacia el bosque, cortó pedazos que sabía ya muertos de los árboles. El camino a casa fue largo, tanto caminar lo había hecho entrar en calor, se quitó el sueter y para cuando llegó de frente a su casa, se dio cuenta que en su desesperación había dejado el fuego de la chimenea encendido, ahora su casa entera se encontraba en llamas. Con los leños en los brazos viendo como todo ardía, se sintió cómodo, dulce calor de hogar.


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