prototipos...

escuché tanto a las ultrasónicas que me volví una de ellas durante varios días, así que me reventé hasta ver la luz de la mañana, fueron días de caminar en el centro y ver como la gente ya iba a sus trabajos mientras yo apenas iba a casa a dormir un rato para después salir de nuevo a buscar aventuras...
fuimos de antro en antro, rostros conocidos se vuelven indiferencia sonriente, las cervezas no alcanzan ni los cigarrillos, busco bocas dispuestas a besarme (siempre se encuentra alguna) ya teniéndolas cerca, decido que no necesito besar, alguien trae más cervezas, más cigarros, más ganas de terminar la noche entre los brazos de algún desconocido, le pido al amigo más cercano que me proteja de lo que quiero hacer, su respuesta es un metafórico putazo en la jeta, "cuando la pasión te llama, no hay fuerza que te pueda detener".
horas después mientras despierto sorprendida de mi falta de calzones (ambos)
decido que ya fue demasiado y regreso a casa tratando de recordar el nombre de ese guey de pelo naranja que me acompaña en el trolebús.