El arca de Noé refugio para mascotas México

y como sea, nunca más volveré a ese trabajo.
la idea de no volver jamás a ese lugar, entrar corriendo y tener que saludar a mitad a mis compañeros, meter el dedo para que quedara registrada la hora de mi llegada y luego prepararme un café entre las charlas matutinas fingiendo a) que me importaba b) que no estaba escuchando, ya era de alguna forma satisfactorio.
Sólo que no sé cómo fue que llegué a este momento, con casi nada mas que lo que tengo puesto que a mitad no es mío y así tan lejos de casa y así tan, por primera vez, realmente sola.
Quería preguntar cosas como: ¿cuáles son tus planes para después? pero no podía preguntar algo a lo que ni yo misma me había puesto a pensar, se me iba el tiempo a pensar cuánto era difícil encontrar lo que antes llamaba "gente como uno" es como si la vida nos fuera tragando poco a poco y al final de eso que fuimos no quede nada, es una tristeza cuando lo que éramos era mejor que lo que ahora somos, es llevar el performance lejos, muy lejos, tanto que se le acaba la parte artística porque nadie lo entiende, se vuelve un hecho real y uno ya no es esa foto que se imagina y le hace reír o pensar que jamás pasara, está pasando y se vuelve lodo pesado sobre los pies, no tenía ni siquiera un par de zapatos decentes que enlodar.