trampitas

Tengo todavía puestos los audífonos, entro saludando a todos pero sin detenerme a saludar a nadie, meto el dedo en el lector laser, otra vez llegué casi a tiempo.

El cuarto del café está lleno y cuando entro las cuatro que están ahí se quedan calladas, luego sonríen en respuesta a mi gruñido, preparo mi taza y voy corriendo a mi área. 

Por fin, después de una hora me siento libre de reir...

Van pasando cada una a su cubículo, moviéndose como si alguien las estuviera viendo, sí, yo las veo pero hago que no las veo porque podrían voltear y verme a la vez, verán que me estoy cagando de risa, ellas llevan esa sonrisa a medias, como de aceptación pero a la vez de total entrega. 

Más tarde nos llaman, el jefe grita y pega en la mesa y por momentos se le quiebra la voz, ellas, entusiasmadas, se unen a su emoción y una que otra derrama una lágrima. Cuando el jefe pide opinión todas alzan la mano, la mia permanece pegada a mi taza de café y la otra está ocupada sosteniendo la libreta que siempre debemos llevar en estas ocasiones de junta extraoficial. 

Una de ellas se levanta y dice: ! esto no es sólo un trabajo, somos parte de esta organización, háganlo desde su corazón, siéntanse parte de este lugar, un ladrillo, no lo hagan por dinero! 

Dinero... cada mañana corro hacia este lugar, dejando cama, amante, desayuno, cigarrillo y lienzo sólo y absolutamente sólo por dinero...

A veces no se puede finjir más de lo necesario.

Se riega el café mientras exploto en carcajadas.

El jefe me mira

no 

espero que no pregunte

diré que como cuando niña y me regañaban y la risa salía incontenible

diré

que 

tos, sí

gran ataque de tos

pero ya estoy llorando

de la risa

me caigo al piso y sigo riendo. 

silencio y todas me miran

Llegan dos de intendencia y me levantan, me llevan al privado del jefe

estoy sólo ahí por una hora, ese blanco de sus paredes que contrasta con todo ese negro de los muebles

y yo miro el cuadro que seguramente compró en Ebay

y seguramente dijo mientras hacía el pedido, " Una manzana, en tres pedazos"

La obra era difícil de entender pero él, entendió

y ahora estaba ahí

colgando del muro de su privado

entonces veo la firma y el abajo firmante había sido mi compañero de escuela de arte, el muy cabrón terminó pintando manzanas en tres pedazos, me acuerdo cuando escupía en las pinturas de la colonia del artista

el muy cabrón

vende

yo 

me vendo

¿Habrá gran diferencia?
Luego llega gran jefe, se sienta

es jefe sentado

gran jefe sentado

Muy serio me dice si entendí el discurso

muy serio le contesto que sí, 

este año no habrá aumento porque en realidad esto debería ser sólo su negocio

nosotros esclavos no participamos

bien

entendió

¿Y la risa?

La risa, si

 eh, tosía 

tosía...

muy bien, insiste en finjir, 

hemos visto su desempeño, una mierda, por decirlo en lenguaje que usted pueda entender.

Lo entiendo

la palabra que busca gran jefe sentado es: mediocre.

Claro señor, soy profesional, hago excelentemente bien mi mediocre trabajo. Ni un peso más ni un peso menos.

Y no es por eso que hoy se va.. 

se va porque todos están contentos 

usted, siempre de prisa, apenas saluda, apenas se mueve entre nosotros

y nos harta

nos hace sentir incómodos

¿Porqué no se puede mezclar, ser uno, no escuchó eso del ladrillo? 

con gusto

gran jefe sentado

gustoso lo haré

¿Usted pagará mi lobotomía?