Bailamos con la luna, divertidos cazamos estrellas
siempre estrellas y la luna iluminàndonos.
era una necesidad, una cosa que debìa comprender...

y tambièn debìa, imperiosamente, maduramente
abrir los ojos.

Pero, las cosas eran como decìas, como decìan todos esos que
me acompañaron en el viaje

y yo, brincaba, duende al fin
luego, despuès de libar el nèctar de flores màgicas, bailàbamos
con la luna,
divertidos,
 cazàbamos estrellas.

Era en realidad necesario,
era parte del secreto y de descubrirlo
y tambièn debìamos imperiosamente,
maduramente
empezar a hacer algo con nuestras vidas...

sòlo que... Si, dilo!
ya, basta de mentiras...
la verdad era que volteaba a ver las vidas de los demàs
su felicidad fingida, sus sonrisas a medias
y no nos interesaba tanto ser parte de eso.

se nos cerraba la garganta de tanto gritar
nos dolìa la panza de tanto reìr.

y luego de libar el nèctar de las flores que nos habìan regalado
despuès de eso
sonreìamos y otra vez a bailar
con la luna
divertidos
usando las estrellas para alumbrar nuestros caminos.



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